En 1979 Fender se enfrentó a una batalla sin cuartel para ganar la competencia contra las guitarras importadas de bajo costo. La respuesta de la compañía fue introducir al mercado una guitarra cómoda, accesible y con una diversidad tonal única, perfecta para musicalizar la revolución punk y new wave
En 1979 Fender se enfrentó a una batalla sin cuartel para ganar la competencia contra las guitarras importadas de bajo costo. La respuesta de la compañía fue introducir al mercado una guitarra cómoda, accesible y con una diversidad tonal única, perfecta para musicalizar la revolución punk y new wave